Niños migrantes sufren depresión y estrés crónico por el bloqueo de Trump

HRW y las universidades de Stanford y de Willamette alertaron sobre la situación que enfrentan los menores que esperan en México una respuesta para ingresar a EEUU

 

Buena parte de los más de 62.000 migrantes que aguardan en México la resolución de sus peticiones de asilo en Estados Unidos, pero sobre todo los niños, viven en medio de la incertidumbre y el estrés.

Un estudio de la ONG Human Rights Watch (HRW) y de las universidades estadounidenses de Stanford y de Willamette, dado a conocer en México, reveló la carga emocional que pesa sobre los menores frente a la política de bloqueo migratorio de Donald Trump.

El Programa de Derechos Humanos en Trauma de la Universidad de Stanford y la Clínica de defensa de Niños y Familias de la Universidad de Willamette, en coordinación con HRW, realizaron entrevistas con padres e hijos de 60 familias solicitantes de asilo entre noviembre de 2019 y enero de 2020.

El estudio señaló que los migrantes observaron en sus hijos cambios en su comportamiento desde que fueron llevados a México: se los ve “más ansiosos y deprimidos”.

“Las condiciones, las amenazas a la seguridad y la sensación de incertidumbre que enfrentan los solicitantes de asilo mientras esperan en México crea estrés psicológico crónico y severo para los niños y las familias”, afirmó Ryan Matlow, profesor de Psiquiatría y Ciencias del Comportamiento.

Estas formas de “trauma complejo generalizado y no resuelto”, a decir del especialista de la Escuela de Medicina de Stanford, coautor del estudio, pueden conducir a “consecuencias negativas significativas a largo plazo para el desarrollo infantil y el funcionamiento familiar”.

Las familias que hicieron de las ciudades de la frontera norte mexicana su “sala de espera” provienen sobre todo de El Salvador, Honduras y Guatemala, pero hay también de Cuba, Ecuador y Perú.

El impacto emocional que afecta a los niños migrantes que aguardan noticias de Estados Unidos en México no es nuevo, pero hasta ahora el gobierno de Andrés Manuel López Obrador no adoptó acciones como apoyo psicológico o un mejoramiento de las condiciones de vida de los niños indocumentados para mejorar su situación.

Los señalamientos coinciden con un estudio previo dado a conocer por la organización civil Médicos Sin Fronteras (MSF).

Según el estudio de MSF, los centroamericanos que viven en México como resultado de las diversas caravanas y de la migración clandestina del último año y medio enfrentan una verdadera “crisis humanitaria” que no tiene “salida”.

“Los secuestros, las extorsiones, los ataques sexuales y las redadas son los principales problemas que afrontan”, informó.

Related posts